La eterna pregunta para un amante de la moda es… ¿Puedo tener en mi armario las mejores tendencias de moda sin que se resienta mi economía? La respuesta es sí. Por suerte en los últimos años las opciones que se nos presentan para contar con las prendas más rompedoras a un precio económico son muy variadas, y las grandes marcas son conscientes de que el futuro pasa por presentar colecciones adaptadas a todos los bolsillos, colecciones “low cost”.
En Mottele contamos con una colección de prendas de gran calidad y adaptadas a todos los bolsillos, para que nuestras clientas puedan disfrutar de la moda sin que les suponga un gasto excesivo ni se convierta en un capricho al alcance de unos pocos.
En primer lugar, desde Mottele recomendamos apostar por aquellas prendas que nunca pasan de moda. Prendas que son atemporales y se deben convertir en un clásico en nuestro armario. Una camisa blanca, unos vaqueros aparentemente desgastados, un vestido negro y una gabardina son elementos indispensables en nuestro outfit que tienen cabida en cualquier época del año y con los que nunca desentonaremos. Esta inversión hará que nos ahorremos dinero a largo plazo ya que estas prendas nunca están fuera de lugar y nos sirven para todo tipo de contextos y reuniones sociales.
Otro de los consejos que os damos desde nuestra empresa es el de aprovechar los periodos de rebajas. A día de hoy las grandes y pequeñas empresas de moda utilizan este reclamo para aumentar su volumen de ventas, y no resulta difícil encontrar los mejores chollos sin gastar demasiado. Vestir bien no está al alcance de unos pocos, como ocurría antaño. Aprovecha las rebajas de invierno, verano y las que suelen promocionarse online para adquirir esa prenda que tanto anhelas o esa nueva tendencia que va a dar que hablar este año.
Pero sobre todo, y el consejo más importante que os damos desde Mottele, es que apostéis por la calidad. Una prenda de calidad, aunque pueda resultar un poco más cara que el resto, nos asegurará un ciclo de vida mayor y justificará la inversión. Nunca estuvo tan al alcance de la mano vestir bien e ir a la moda.